Entrevista a Toño García, presidente del Copae
Su vida no estuvo siempre ligada al campo y tampoco desciende de familia agrícola. Llegó al sector primario después de arruinarse con una empresa de construcción. En 2012 decidió reinventarse y vio en los productos con sello ecológico una oportunidad. Se trata de José Antonio García, Toño, de Arándanos La Peña (Salas), que es desde hace unas semanas el presidente del Consejo Regulador de la Producción Ecológica de Asturias (Copae). El resto del consejo lo forman Silvia Menéndez, Diego Bárcena, Jesús Méndez, José López, Noelia García y Alberto Juesas. Con esta renovación, el Copae ha pasado a ser una corporación de derecho público integrada por 750 operadores, entre productores, transformadores, comercio y ganadería.
— ¿Cómo afronta el cargo de presidente del Copae?
— Es un reto que afronto con mucha ilusión y responsabilidad. Por delante tenemos cuatro años para potenciar y difundir lo que significa producir y consumir en ecológico. Afrontamos los retos siendo conscientes de la responsabilidad que tenemos encima. Lo cierto es que estamos muy contentos.
— ¿Cuáles serán los ejes de su mandato?
— Uno de ellos será la comunicación por dos vías muy claras: una dirigida al consumidor, lo que implica consumir productos ecológicos, lo que conlleva respecto a un tema medioambiental y un tema de salud; y otra destinada a concienciar e implicar a jóvenes, y no tan jóvenes, agricultores y ganaderos para que apuesten por producir y cultivar en ecológico.
— ¿Por qué decidió presentar su candidatura a la presidencia del Copae? ¿Se necesitaba un cambio?
— Me gusta, llevo más de un mes en el cargo y hay mucho trabajo por delante. También es un lío que conlleva trabajo, pero decidí presentarme porque creo que era necesario. La Junta anterior hizo un buen trabajo, pero creo que era el momento de darle un impulso; yo tenía tiempo, y creo que capacidad, y un equipo alrededor que hizo que diéramos el paso juntos.
— ¿Qué le falta al sello ecológico?
— Faltar…, no creo que le falte nada porque ya de por sí la ecología es todo bondad. Lo único que quizá nos falta es difundirlo y llevarlo al mayor número de personas posibles.
— Hágame una radiografía actual de la agricultura ecológica en Asturias.
— Aunque parezca mentira, el problema que vemos en Asturias es que estamos a la cola de España en producción ecológica porque bajo el mantra de que en Asturias todo es verde, sostenible, la biodiversidad y que todo es naturaleza parece que lo ecológico queda relegado a un segundo o tercer plano. Por ejemplo, se confía en que todo lo que lleve el sello igp o el de Alimentos del Paraíso, que abarca tanto productos convencionales como ecológicos, ya es lo más natural del mundo y parece que lo ecológico se queda en otro plano. En Asturias hay que diferenciar eso y potenciar que nuestra tierra sea la primera en apostar por productos ecológicos.
— ¿Se consume producto ecológico en Asturias?
— Se empieza a consumir, pero menos que la media nacional. Va poco a poco.
— ¿Y se exporta?
—Sí, mucho, tanto producción primaria de fruta —sobre todo de arándano, que es un referente y llevamos muchos años exportando— como el kiwi, que también es potencia. Después, también hay empresas de transformación muy potentes en Asturias que a nivel nacional están en toda la península.
— ¿Sigue siendo el relevo generacional un problema para el sector?
— Tenemos que concienciar de que el campo puede ser una oportunidad. Y también tenemos que implicar a la mujer rural, que se vea que aquí hay una vía en la cual se puede conciliar y ser algo vehicular con la familia y la granja y, sobre todo, saber que es rentable y una manera de ganarse la vida de manera digna.
— ¿Cómo ha afectado la pandemia?
— Afectó en el lado negativo a nivel personal de cada uno; pero, paradójicamente, sí se está viendo un pequeño estímulo de lo que significa consumir sano, cuidar el medioambiente y preservar los valores de la naturaleza, por encima de la química y un consumo excesivo y poco responsable.
— ¿Qué ayudas recibe lo ecológico desde las instituciones?
— Están contempladas ayudas vinculadas a la Política Agraria Común (PAC), pero necesitamos más recursos. Nosotros, desde el Copae, lo enfocamos hacia el tema de la visibilización, promoción y comercialización. En esta legislatura, otro de nuestros ejes será el de la formación, desde el cultivo y manejo de las labores agrarias propiamente dichas hasta una formación empresarial, de saber lo que supone estar en el medio rural, en el sector primario.