El fruto del otoño regresa puntual pese a la cancelación del tradicional certamen de Arriondas

El frío advierte de la llegada de las castañas, un producto seña de identidad para muchas localidades de la comunidad. Una de ellas es Arriondas, la capital del concejo de Parres, que cada año por el mes de noviembre organiza el festival dedicado a este producto. No podrá celebrarse en este extraño 2020, lo cual no impedirá que miles de asturianos disfruten de un amagüestu, aunque sea en el refugio del hogar, y que Arriondas siga siendo tierra de castañas.

Todo parragués y cualquier cosechero de castaña tienen marcado en el calendario el certamen de Arriondas, que este año se iba a celebrar el fin de semana posterior al puente de Todos los Santos en la Plaza Venancio Pando y zona adyacente. La capital parraguesa hace ya tiempo que ha convertido la castaña en objeto de culto gastronómico: en esta edición que ha tenido que ser cancelada había confirmados más de 100 expositores que llevarán su producto para la venta y lo someterían a competición.

Hortensia González tiene 75 años y es una veterana del festival. “Ha ganado el primer premio en muchas ocasiones”, explica su hija Charo. Hortensia ha hecho de una dedicación, el apañar castañas, una devoción. Se ha llevado ya tantos galardones a la mejor castaña que no sabe ponerle número. Modesta, dice que no existe ningún secreto, tan solo “cuido el castañar tan guapo que tengo y trato el fruto con mucho cariño”. Lo tiene en Huexes, una pequeña localidad donde pasa los días junto a su huerto y más de un perro. Cuatro, tiene.

Hortensia lleva décadas dedicándose a este fruto, por el que siente verdadera pasión. Tanto que se la ha transmitido a futuras generaciones, entre ellas a su hija Charo, con quien es habitual verla apañar castañar. Sus nietas la suelen acompañar también en la muestra y le ayudan en la puesta en escena del expositor. “Trabajan mucho, me ayudan, y aquí también tienen su pequeño huerto”, apunta Hortensia.

Hortensia mantendrá vigente, debido a la suspensión de este año, el último galardón a la mejor castaña entregado en Arriondas. En 2019 llevó 72 variedades diferentes. “Se premia la calidad, la limpieza, el expositor y cómo presentas las castañas”, explica Charo.

Acudir al festival no es cosa de un día. Ni de dos. No es solo coger castañas y llevarlas al certamen. Detrás hay mucho trabajo, el que da el “coger, seleccionar, limpiar, es un trabajo muy laborioso. La gente cree que es ir ya está, pero hay mucho tiempo y esfuerzo detrás”, dice Charo. Todo ese trabajo ha sido en balde en esta ocasión.

Variedades

La castaña más codiciada es la valduna, pero también están otras variedades como la temprana, que llama la atención por su tamaño y que se utiliza para la elaboración de postres. Hortensia González lleva toda una vida dedicada al campo, al mundo rural, siempre con ganado en casa y con la huerta. Sostiene entre risas que me “tendrían que dar la castaña de oro”. Sería un galardón más en su colección de “trofeos” a una trayectoria dedicada al campo. Para premiar su labor, a mediados de octubre recogió de manos del colectivo feminista Muyeres Rurales del Oriente el galardón Muyer Rural 2020.

Festival cancelado

La 30 edición del Festival de la Castaña y Productos de la Huerta llegaba cargado de actividades, que han tenido que ser canceladas por la situación de la pandemia. El Ayuntamiento de Parres ya prepara la edición de 2021. Porque castañas seguirá habiendo y podremos celebrarlo.